El Cristo de la Salud en la Semana Santa sanluqueña.(montaje fotográfico-pincha imagen)

Como se ha dicho en una entrada anterior de este mismo blog, a principios del siglo XX, hasta 1918 ó 1919 -año éste último en que la hermandad de la Vera Cruz adquirió el Crucificado que actualmente tiene- el Cristo de la Salud salía el Jueves Santo como titular de esa hermandad, dado que consta en las actas de la misma que se realizaban pagos a unos hombres “por llevar y traer el Enclavao de San Eustaquio”.

Aún me falta contrastar documentalmente el dato, pues este hecho lo conozco por comentarios verbales del secretario de esa hermandad. Una vez que lo compruebe, estaré en condiciones de aportar más referencias sobre durante cuántos años se hizo esto, y desde qué fecha.

No obstante, sabemos que de eso hace un siglo.

Por tanto, en recuerdo de aquellas estaciones de penitencia con el Cristo de la Salud, ofrecemos un montaje fotográfico para dar idea de qué se vería hace un siglo la mañana del Jueves Santo en la capilla de la Vera Cruz.(Pincha en la imagen para ver a mayor tamaño) Figura el Cristo de la Salud en el antiguo paso -sustituido en 2003 por el actual-, cuya canastilla es de gran mérito artístico -¿habrá salido de Sanlúcar esta obra de arte?- , tallada por José Barela en el año 1774, según consta en contrato conservado en el Archivo de Protocolos notariales de Sevilla:

“Sépase como yo José Barela, maestro escultor, vecino de esta ciudad (…) que mediante tengo contratado con la Hermandad de la Sª Vera Cruz, sita en la capilla de dicho título de la Iglesia Parroquial, de la citada Sanlúcar la Mayor, la fábrica de un paso de cofradías de talla para la referida hermandad (…) otorgo que me obligo a que en término de tres meses y medio contados desde hoy (…), daré hecho y acabado (…) el referido paso con sus parigüelas de cinco varas y media de largo, y dos y media de ancho (…) cuatro ángeles en las esquinas, con atributos de la pasión y otros doce más de cuerpo entero y dos serafines y espejos (…), y por el trabajo y maderas de él, se me han de dar dos mil seiscientos y cincuenta reales de vellón” (Ofc. 12, Lº 1774, fol. 157 v).

Teniendo presente que la imagen de la Virgen de la Piedad es del siglo XVIII, obra posiblemente de José Montes de Oca -originalmente tenía las manos entrelazadas-, el conjunto que esa mañana de Jueves Santo se concentraba en la capilla de la Vera Cruz era sin duda de gran mérito artístico y notable antigüedad: un Crucificado del siglo XVI, probablemente de Juan Bautista Vázquez “el viejo”, sobra canastilla del XVIII, y junto a una Dolorosa de la misma época, todavía sin alterar, tal como fue concebida por el imaginero que la talló.

Este viaje en el tiempo me recuerda que hace unos cuatro o cinco años, cuando todavía el Cristo de la Salud estaba en Santa María -no fue trasladado a San Eustaquio hasta Diciembre de 2006- , la hermandad de la Vera Cruz estuvo realizando reformas en su capilla y su casa de hermandad, y por ese motivo sus imágenes titulares fueron trasladadas a la Parroquia. Hubo unos días –el que suscribe lo recuerda muy bien- en que se produjo una de esas casualidades que son una especie de viaje al pasado de una hermandad: El Cristo de la Vera Cruz estaba en el altar mayor de la Parroquia, por ser las fechas de su quinario, y en el altar provisional que la hermandad tenía montado se puso al Cristo de la Salud junto a la Virgen de la Piedad. Juntos otra vez, como un siglo antes.

Rafael Laza Laza